La historia de Boni, es por desgracia, el inicio de muchas historias aunque en su caso, doblemente triste.
Su dueño, falleció en 2015 y fue entregada en la Protectora de Vigo, por uno de los familiares. Un mes después, se hizo cargo de ella el padre de su anterior propietario, pero años después, éste también falleció y en enero de 2020, Boni volvió a la protectora porque nadie podía quedarse con ella y hacerse cargo de su atención y cuidado.
Boni es una perrita de tamaño pequeño, de 10 años aproximadamente. Muy sociable, cariñosa con las personas, y algo mandona con los otros perros si le llegan a molestar ( si no, es una bendita). Tiene carácter, pero eso no le resta ni un ápice de dulzura.